domingo, 11 de octubre de 2009

confesión

Si hablamos de sincerdidad
Debo admitir que hay días que tus besos se me hacen necesarios
Una de esas suaves y tiernas caricias, como cuando corrias mi pelo de mi rostro
Quizás uno de esos rápidos besos de despedida
O simplemente un abrazo de esos eternos.
Si quiero dejar de reprimir las cosas
Creo me es más simple admitir que
Tus manos alrededor de mi, eran lo mejor
Tu piel, tu olor, tu mirada, tu pelo.

Hay días en que simplemente no te quiero ni recordar
Hay días en que los recuerdos se hacen mis aliados.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Te sinceraste en lo más recóndito de tu ser.
Me gusta... a veces, cuando estás con esa persona que te provoca la sensación llamada amor, deja rastros de locura en tu interior. Revientas a gritos de amor, locura e ira.

El amor... sí que es difícil, no?


Cariños Pame!

 kotto dijo...

pero aveces
es triste recordar,
aquellos recuerdos
que dificilmente volveran...

:-(

franco ferreira dijo...

aprovecha cada uno de esos días no más. Y, mejor aún... aprovecha esos moemntos de los cuales rescatarás recuerdos, cada vez más necesarios ;)

cuídate y te sigo leyendo, obvio

young_supersonic dijo...

HAY NIÑA.
DEJA DE AHOGARTE EN EL MISMO VASO.
YA TE LO HE DICHO, TIENES TODO POR DELANTE.

Y ALÉGRATE PORQUE TU QUERIDO PROFESOR GANÓ SU PRIMER CONCURSO DE CUENTOS.